-Ahora son perseguidos por reclamar sus tierras y buscar los restos de sus deudos
Han estado callados, por miedo, hasta ahora, pero finalmente se han decidido a denunciar. Unas 160 personas han puesto en conocimiento de la Fiscalía y la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación que están siendo perseguidas. Les hostigan con amenazas de muerte o les ofrecen pequeñas cantiades de dinero, para que dejen de reclamar.
Han estado callados, por miedo, hasta ahora, pero finalmente se han decidido a denunciar. Unas 160 personas han puesto en conocimiento de la Fiscalía y la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación que están siendo perseguidas. Les hostigan con amenazas de muerte o les ofrecen pequeñas cantiades de dinero, para que dejen de reclamar.
En el departamento de Córdoba fue asesinada Yolanda Izquierdo, y los campesinos que trabajaban a su lado guardan ya silencio. En Bolívar, fue incendiada la sede de los desplazados en la población de Turbaco y asaltadas las oficinas de dos oenegés que asesoran a víctimas y les robaron los archivos con información de crímenes de paramilitares. Para la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes), tratan de amedrentar a quienes participan en los procesos de Justicia y Paz , para que no aporten datos sobre las masacres, además de asegurarse el robo de las tierras a las comunidades.
El gobierno dice que hace, pero...el plan paramilitar avanza
El Gobierno anunció un plan de protección, que tenía que haber estado listo hace dos meses, pero que sigue sin concretar. El diario El Tiempo relata casos, como el de hace unas semanas en el aeropueto de Bogotá. Allí, un grupo de campesinos se despiden y se abrazan entre 
lágrimas. "Son testigos contra 'McGiver'. Están amenazados y les toca irse del país. Es que hay un nuevo éxodo de víctimas", relata una persona, de una organización humanitaria que les acompaña.
Otro caso: Amparo Areiza, hija de una de las 15 víctimas de la masacre de El Aro.Los mensajes le llegaron al teléfono móvil y a los domicilios de su hermana y de su madre: "No se compliquen la vida ni se la compliquen a los suyos. Ya les pagaron a su papá, quédense tranquilos." Cuenta Amparo que las amenazas anteriores les habían obligado a salir de Yarumal y recorrer varias ciudades del país. "Luego tuvimos un periodo de calma-añade- pero desde que empezó la versión libre de Salvatore Mancuso y decidimos asistir, comenzaron esas llamadas"."Eso nos indigna porque los paramilitares tienen todas las ventajas mientras que las víctimas, tenemos que seguir huyendo".
lágrimas. "Son testigos contra 'McGiver'. Están amenazados y les toca irse del país. Es que hay un nuevo éxodo de víctimas", relata una persona, de una organización humanitaria que les acompaña.Otro caso: Amparo Areiza, hija de una de las 15 víctimas de la masacre de El Aro.Los mensajes le llegaron al teléfono móvil y a los domicilios de su hermana y de su madre: "No se compliquen la vida ni se la compliquen a los suyos. Ya les pagaron a su papá, quédense tranquilos." Cuenta Amparo que las amenazas anteriores les habían obligado a salir de Yarumal y recorrer varias ciudades del país. "Luego tuvimos un periodo de calma-añade- pero desde que empezó la versión libre de Salvatore Mancuso y decidimos asistir, comenzaron esas llamadas"."Eso nos indigna porque los paramilitares tienen todas las ventajas mientras que las víctimas, tenemos que seguir huyendo".
Salvatore Mancuso es el máximo dirigente de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y testifica ante la Fiscalía, para acogerse a los beneficios que el gobiernode Álvaro Uribe ha concedido a los paramilitares, para resolver sus crímenes atroces con una reclusión menor. De paso, legalizan sus propiedades, mediante los trucos que permite la ley de Justicia y Paz o mediante la extorsión.
Uribe resuelve lo que otros organizaron
Pero la impunidad no es cosa sólo de este Gobierno. El Proyecto Paramilitar es consustancial al Estado que es sostenido por lo que, en Colombia, se denomina 'el establecimiento'. Y las pruebas se repiten año tras año, desde hace décadas. Como sucede ahora con el siguiente relato, de nuevo, del diario El Tiempo, que tiene como coprotagonista, también, al 'pájaro' Mancuso.
La información va ilustada con una fotografía en la que aparecen Salvatore Mancuso (izq) y 'Jorge 40' (dcha), 
el día que fueron retenidos por el homicidio de dos personas. Recuperaron la libertad horas después y más tarde les devolvieron, incluso, las armas homicidas. Fue el 4 de mayo de 1997. Las dos víctimas eran presuntos invasores de una pequeña parcela dentro de la finca de un poderoso terrateniente de la región de La Guajira.
Salvatore Mancuso Gómez y su entonces subalterno, Rodrigo Tovar Pupo, alias 'Jorge 40', iniciaban entonces su carrera paramilitar en esa zona del Noreste de Colombia. Ahora Mancuso declara que la orden de libertad la dió el entonces Director de la Policía Nacional, hoy embajador en Austria, el general Rosso José Serrano. Añade Mancuso que el favor del alto oficial se debió a que era muy cercano a la organización y amigo del desaparecido jefe de las AUC Carlos Castaño.
el día que fueron retenidos por el homicidio de dos personas. Recuperaron la libertad horas después y más tarde les devolvieron, incluso, las armas homicidas. Fue el 4 de mayo de 1997. Las dos víctimas eran presuntos invasores de una pequeña parcela dentro de la finca de un poderoso terrateniente de la región de La Guajira.Salvatore Mancuso Gómez y su entonces subalterno, Rodrigo Tovar Pupo, alias 'Jorge 40', iniciaban entonces su carrera paramilitar en esa zona del Noreste de Colombia. Ahora Mancuso declara que la orden de libertad la dió el entonces Director de la Policía Nacional, hoy embajador en Austria, el general Rosso José Serrano. Añade Mancuso que el favor del alto oficial se debió a que era muy cercano a la organización y amigo del desaparecido jefe de las AUC Carlos Castaño.
Termina la legislatura paramilitar
El próximo miércoles acaban las sesiones del Congreso, con lo que se pone fin a la primera parte de una legislatura dominada por el escándalo de la 'parapolítica'. Senadores y representantes en prisión, junto a gobernadores y demás firmantes del llamado 'pacto de Ralito' en el que se comprometieron con los asesinos paramilitares a los que luego Uribe, que no está en la cárcel, presentó como pacificadores en su Ley de Justicia y Paz. El escándalo no ha concluído y en las sesiones que se reinician después del 20 de Julio seguirán saliendo las vergüenzas de un Congreso que ya tiene a 13 congresistas y 5 ex legisladores en la cárcel. Aunque si las cosas se ponen feas, quizá venga bien, para huir, el túnel que por 4 mil millones de pesos, construyó el Senado para conectar al Capitolio con el edificio nuevo del Congreso. Quien sabe.
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