América Latina es el continente más peligroso para desarrollar actividades sindicales y Colombia es el país con más muertes de sindicalistas, indica la CSI (Confederación Sindical Internacional) en su informe anual. La CSI representa a 168 millones de trabajadores de 155 países y territorios y cuenta con 311 organizaciones sindicales nacionales afiliadas.
El estudio evalúa la situación en 138 países durante el año 2007. En este periodo fueron asesinados 91 sindicalistas.
El estudio evalúa la situación en 138 países durante el año 2007. En este periodo fueron asesinados 91 sindicalistas.
"En todo el mundo un total de 91 sindicalistas fueron asesinados por defender los derechos de los trabajadores, siendo una vez más Colombia, dónde 39 personas perdieron la vida, de lejos el país donde más crímenes se cometieron", indica la CSI en este informe difundido desde Bruselas.
El CSI señala , además, que un total de 73 sindicalistas fueron encarcelados en el 2007 en todo el mundo. El análisis del 2007 permite observar la reducción en el número de víctimas respecto al 2006. En ese año se registraron 144 crímenes contra representantes sindicales en todo el mundo. Y 78 de estas ejecuciones fueron realizadas en Colombia.
El estudio señala que la situación de los sindicalistas en América Latina es "dramática", lo que le vale el "dudoso honor de ser el continente más mortífero" para quienes desarrollar actividades sindicales.
"América Latina ha sido una vez más en 2007 el continente más peligroso para desarrollar actividades sindicales, con asesinatos, secuestros, amenazas de muerte y agresiones en numerosos países", dice el informe.
"América Latina ha sido una vez más en 2007 el continente más peligroso para desarrollar actividades sindicales, con asesinatos, secuestros, amenazas de muerte y agresiones en numerosos países", dice el informe.
Además de Colombia, se registraron asesinatos en "Guatemala, Argentina, Brasil, Chile, El Salvador, México, Panamá y Perú". El informe llama la atención sobre la "preocupante" situación de los trabajadores organizados en Guatemala
" con 4 sindicalistas asesinados en medio de un clima de amenazas y acoso que continúa deteriorándose".. El documento también explicó que Perú muestra como algo habitual el "hostigamiento antisindical y los despidos selectivos y masivos".
" con 4 sindicalistas asesinados en medio de un clima de amenazas y acoso que continúa deteriorándose".. El documento también explicó que Perú muestra como algo habitual el "hostigamiento antisindical y los despidos selectivos y masivos".
El estudio, que cubre las violaciones de los derechos sindicales en 138 países, apunta además a la "connivencia entre algunos gobiernos y empleadores" para privar a los trabajadores y trabajadoras de sus derechos legítimos a la sindicalización y representación. "En muchos países los Ministerios de Trabajo no protegen ni la ley ni los derechos sindicales", indica el texto, afirmando que "en Estados Unidos, la 'guerra contra el terrorismo' ha sido utilizada como pretexto para recortar significativamente los derechos sindicales de los empleados del gobierno".
En Colombia, 474 sindicalistas asesinados con Uribe
En el caso de Colombia, la CIS constata que se ha observado una "ligera reducción en el número de homicidios respecto al año pasado", aunque esto se debe a que "muchos intentos de asesinato de sindicalistas fracasaron".
"Esta buena noticia relativa se viene abajo frente al resurgimiento de otras formas de violencia: se duplicó el número de atentados, aumentaron los desplazamientos forzados, los allanamientos ilegales, las detenciones arbitrarias y el nivel de amenazas", explica el informe.
Hace una semana, las confederaciones obreras de Colombia enviaron una carta al presidente Álvaro Uribe en la que le acusan de haber implementado una política que va contra los trabajadores y de "desconocer las organizaciones sindicales" y aseguban que el 97% de los crímenes contra sindicalistas se encuentran en la impunidad.
La denuncia coincide con las gestiones telefónicas que Uribe realiza con el gobierno entrante de Estados Unidos para intentar que el Congreso norteamericano apruebe el TLC. Pero la mayoria demócrata exige que Bogotá resuelva el problema de los asesinatos de sindicalistas y aclare el escándalo por nexos de políticos del entorno de Uribe con paramilitares. Para contentar a los demócratas de Estados Unidos, Uribe pretende ahora escenificar un diálogo con los sindicatos. Pero las organizaciones sindicales adviertien que no se reunirán con Uribe mientras mantenga esa política y se "niegue a discutir y definir su posición (...) respecto de la problemática social que atañe a los trabajadores".
"Esta buena noticia relativa se viene abajo frente al resurgimiento de otras formas de violencia: se duplicó el número de atentados, aumentaron los desplazamientos forzados, los allanamientos ilegales, las detenciones arbitrarias y el nivel de amenazas", explica el informe.
Hace una semana, las confederaciones obreras de Colombia enviaron una carta al presidente Álvaro Uribe en la que le acusan de haber implementado una política que va contra los trabajadores y de "desconocer las organizaciones sindicales" y aseguban que el 97% de los crímenes contra sindicalistas se encuentran en la impunidad.
La denuncia coincide con las gestiones telefónicas que Uribe realiza con el gobierno entrante de Estados Unidos para intentar que el Congreso norteamericano apruebe el TLC. Pero la mayoria demócrata exige que Bogotá resuelva el problema de los asesinatos de sindicalistas y aclare el escándalo por nexos de políticos del entorno de Uribe con paramilitares. Para contentar a los demócratas de Estados Unidos, Uribe pretende ahora escenificar un diálogo con los sindicatos. Pero las organizaciones sindicales adviertien que no se reunirán con Uribe mientras mantenga esa política y se "niegue a discutir y definir su posición (...) respecto de la problemática social que atañe a los trabajadores".
Piden al congreso de EE.UU. no ratificar el TLC
Ante el inicio de las sesiones extraordinarias en el congreso de Estados Unidos y la posibilidad de que sea discutido el Tratado del Libre Comercio con Colombia, varias organizaciones enviaron una carta a la presidenta de la Cámara Nancy Pelossi, en la que describen la persistente violación de los derechos humanos y el deterioro de las condiciones de vida de las comunidades indígenas y le solicitaron su apoyo para que los proyectos como el TLC y el Plan Colombia, que afectan negativamente al pueblo colombiano, sean replanteados.
"A pesar de los esfuerzos del gobierno colombiano por presentar avances en el respeto a los derechos humanos y disminución de la violencia antisindical ante el congreso de Estados Unidos, con el fin de conseguir el apoyo al TLC y al plan Colombia, la realidad es muy distinta, como se evidencia en los informes y evaluaciones realizadas por las organizaciones de derechos humanos en el país, de los cuales se hace un recuento en la carta enviada al congreso estadounidense", afirman las organizaciones.
La carta es firmada por la Coordinación Colombia Europa Estados Unidos, la Plataforma Colombiana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo, la Asamblea Permanente de la Sociedad Civil por la Paz, la Alianza de Organizaciones Sociales y Afines y la Red Colombiana de Acción frente al Alca.
Ante el inicio de las sesiones extraordinarias en el congreso de Estados Unidos y la posibilidad de que sea discutido el Tratado del Libre Comercio con Colombia, varias organizaciones enviaron una carta a la presidenta de la Cámara Nancy Pelossi, en la que describen la persistente violación de los derechos humanos y el deterioro de las condiciones de vida de las comunidades indígenas y le solicitaron su apoyo para que los proyectos como el TLC y el Plan Colombia, que afectan negativamente al pueblo colombiano, sean replanteados.
"A pesar de los esfuerzos del gobierno colombiano por presentar avances en el respeto a los derechos humanos y disminución de la violencia antisindical ante el congreso de Estados Unidos, con el fin de conseguir el apoyo al TLC y al plan Colombia, la realidad es muy distinta, como se evidencia en los informes y evaluaciones realizadas por las organizaciones de derechos humanos en el país, de los cuales se hace un recuento en la carta enviada al congreso estadounidense", afirman las organizaciones.
La carta es firmada por la Coordinación Colombia Europa Estados Unidos, la Plataforma Colombiana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo, la Asamblea Permanente de la Sociedad Civil por la Paz, la Alianza de Organizaciones Sociales y Afines y la Red Colombiana de Acción frente al Alca.
(Fuentes: Agencia PÚLSAR, AFP, El Tiempo-Bogotá y Adital)
No hay comentarios:
Publicar un comentario