Jornadas Universitarias madrileñas sobre el Sahara Occidental

"ESPAÑA NO QUIERE QUE EL CONFLICTO DEL SAHARA SE RESUELVA"

El representante ante la ONU de la RASD, la República
Árabe Saharaui Democrática, Bujari Ahmed, ha contado un cuento tradicional. La Tierra está sostenida por un toro con sus cuernos, y si da una embestida contra la esfera, para uno u otro lado, la destroza. Y eso sería el fin del mundo. Pero hay una mosca que no hace sino molestar al toro y que le distrae, con lo que evita la embestida. El toro sería Marruecos, la esfera España y la mosca el conflicto del Sahara. España no sabe hacia donde daría sus embestidas el toro marroquí si no estuviera entretenido por la mosca saharaui. Así es que España no quiere que la mosca deje de entrener al bicho.

O sea que el Gobierno de España no quiere que el conflicto del Sahara se resuelva. El diplomático saharaui añadió que España actúa en la mala dirección en relación con el Sáhara Occidental, y que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se equivoca si cree que puede solucionar el problema jugando sólo en la cancha marroquí.
Bujari Ahmed respondía a una pregunta de PEPITORIAS, en la primera sesión de las Jornadas que se celebran en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, bajo el lema Política y cooperación. Tiempo de soluciones para el Sahara Occidental, organizadas por las Universidades Públicas madrileñas


El lobby marroquí
La pregunta era tan concreta como, qué ocurre en el gobierno Zapatero, como ocurrió con los gobiernos de Felipe González, qué ocurre en el Psoe, que cuando llega al poder siempre se dedica a defender las posiciones de Marruecos, a traicionar sus promesas y compromisos con el Sahara, con los saharauis, con el Frente Polisario. ¿Hay un lobby pro-marroquí en el Gobierno Zapatero, en el Ministerio de Exteriores, en el Psoe? La mesa, compuesta por el embajador de Argelia en España, el Ministro delegado de la RASD en la UE Mohamed Sidati (en la fotografía), dos profesores universitarios, un investigador y ex-oficial de las tropas coloniales españolas en el Sahara, no ha confirmado ni desmentido la existencia de tales lobbies. Pero haberlos, haylos.
El gobierno Zapatero forma parte de los llamados Países Amigos del Sahara Occidental. Y en ese grupo los hay que guardan la debida neutralidad, como Rusia y Gran Bretaña, al menos en cuanto a no mantener posiciones contrarias a la legalidad internacional. Lo que, en el caso del ex-Sahara español significa reconocer el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, como establecen todas y cada una de las resoluciones aprobadas por las Naciones Unidas. Es el caso de la última, la número 1754, aprobada a finales de Abril y en la que, además de reconocer ese derecho, insta a las partes -Marruecos y el Frente Polisario- a negociar una salida que posibilite al pueblo del Sahara Occidental el ejercicio de ese derecho.

España, Francia, Estados Unidos....
El Polisario ha vuelto a extender la mano y ha ofrecido a Marruecos negociaciones. Marruecos acepta negociar...su propuesta: La autonomía de un Sahara Occidental dentro de Marruecos. Y esa es la posición que aplaude, apoya y fomenta el Gobierno español, con el lobbye Zapatero-Moratinos al frente. Una propuesta que niega el derecho de autodeterminación que reconoce la ONU. Es la posición que defiende Francia, siempre junto a Marruecos. Y, para pescar en río revuelto, Estados Unidos, que añade la dosis malintencionada e intoxicadora de que viene el lobo de Al Qaeda, que los otros dos corifeos se aprestan a difundir.
Como se ha dicho en estas interesantes jornadas, los saharais han dado suficientes muestras de paciencia, en estos más de 30 años de ocupación. Ni han practicado nunca el terrorismo ni su lectura del Islam se ha acercado nunca a la de los integristas yihadistas. Más bien la RASD, en cuyos principios está el compromiso por la democracia, la tolerancia y el respeto, puede servir de ejemplo de laicismo para un futuro Magreb libre de esos peligros con los que amenaza la propaganda urdida en Washington.

No hay Magreb sin Sahara libre
Como ha dicho el Ministro saharaui Mohamed Sidati, no hay posibilidad de construir el Gran Magreb (Mauritania, Marruecos, Túnez, Libia....)si no se resuelve el conflicto del Sahara. El Frente Polisario lucha por su independencia, en el marco de un Magreb democrático, en el que impere el respeto mútuo de todos los pueblos, incluido el saharaui y el conflicto es un obstáclo para la concreción de ese Magreb.El Magreb no se construirá sobre los despojos, sobre el cadáver, del pueblo saharaui, ha dicho el ministro Sidati. Y ha añadido que sin el ejercicio del derecho de autodeterminación para los saharauis, no habrá estabilidad en la región. El ministro de la RASD ha considerado, asímismo, poco realistas las pretensiones de España y Francia que, ha dicho, ponen como escusa la estabilidad de Marruecos, para apoyar sus tesis. Con esas tesis-decía Sidati-Marruecos en lugar de respetar la legalidad internacional y jugar limpio, se aleja de la solución, que es el derecho de autodeterminació del pueblo saharaui.

El pueblo español, con la RASD
La sociedad española es la más sensibilizada de Europa con el drama del pueblo saharaui. El embajador de Argelia en Madrid, Mohamed Haneche, ha dado fe de un hecho que se evidencia día a día. Miles de españoles aportan su solidaridad a la RASD, reciben en sus casas todos los veranos a los niños que llegan desde los campamentos, hacen que instituciones, ayuntamientos, organizaciones, sigan llevando allí la ayuda humanitaria y la cooperación que sirve al menos para aminorar las duras condiciones en las que se desarrolla la vida del pueblo saharaui trasterrado a la hamada.
Argelia, aseguraba el embajador, apoya al pueblo saharaui pero no mantiene ninguna reivindicación sobre su territorio. Aunque considera que la no resolución del conflicto impide el desarrollo armónico de la región y su inserción en un marco global. Y ahí, en la falta de desarrollo, es donde está el verdadero peligro de la inestabilidad, del terrorismo yihadista, que ya es un hecho en Argelia, en Marruecos, en Malí. No en en Sahara Occidental.

Haizam Amirah Fernández, investigador del Real Instituto Elcano, se muestra pesimista. Y aunque tanto el Polisario como Marruecos han aceptado la oferta de la ONU para iniciar negociaciones, cree que la monarquía marroquí sólo está dispuesta a negociar su plan de autonomía, nunca un plan para el ejercicio del derecho de autodeterminación. Y asegura que los aliados de Marruecos, España, Francia y Estados Unidos, tratan de mostrar la imagen de que Rabat quiere negociar, que es flexible y abierto; pero la oferta marroquí no llevará a nada. El Polisario, el gobierno de la RASD, es de la misma opinión.